4- Acostumbrarse al cambio hasta darse cuenta que valió la pena

La barra del cacique

La barra del cacique, antes llamado el caciquito, solía deleitarnos con fondues de carne y de queso, un plan divertido y de buena comida.

A los que frecuentábamos el lugar nos costó aceptar que el sitio se hubiese reformado abandonando el plato que le hacía único y uniéndose a un listado interminable de sitios "para picar algo".

Sin embargo el que es bueno es bueno, y tras un par de visitas la barra del cacique no me defrauda en su nuevo enfoque.

La barra del cacique es ahora un local de dos plantas más terraza con una carta no muy larga de productos sencillos pero suficientemente variados. Una impresionante barra de marmol en la primera planta da nombre al lugar.

Me encantan las pizzas individuales (especialmente la de jamón ibérico o la margarita), hechas justo como me gustan: masa fina y mucho queso.

Pizza Margarita

También tienen una variedad de platos fríos de buena calidad como los boquerones en vinagre o la ensaladilla rusa.

Otros platos a mencionar: el chorizo, la hamburguesa...

En general un sitio "para picar algo" en un ambiente agradable y con un servicio rápido.

Y las copas en buenos vasos de balón!!

Precio aproximado por persona: 15-20€

Calle del Padre Damián, 47  28036 Madrid
913 450 303

3-...Y ya que pilla de paso, quiero ir al Sudeste Asiático!

Restaurante Lah!

En el antiguo Wok de María de Molina, un restaurante de la misma zona geográfica nos trae una experiencia para todos los sentidos.

En Lah! podemos encontrar platos típicos de Vietnam, Tailandia, Malasia o algún otro paraíso del sud este asiático. Me comenta una persona que conozco de Malasia que sus platos se parecen mucho a las recetas originales.

Lo primero que sorprende es el local, un espacio moderno con un decorado distinto, que choca con su comida tradicional.

Tiene un toque original, ya que rompe con esa sensación que tenemos los occidentales de no saber lo que pedimos cuando vamos a un restaurante asiático: te ofrecen un iPad para que puedas ver fotos de todos sus platos.

Un servicio muy atento, que conoce la carta y está dispuesto a resolver todas las dudas y darte recomendaciones (parece obvio, pero no lo es).

Mucho que pedir y experimentar.

Lo mejor: dejar la mesa para dos para otro día y centrarse en el (o más) e ir en grupo para poder probar muchos entrantes y platos principales.

Algunas cosas son picantes y lo recomendable es dejarlas para el final para no perdernos el sabor de los otro platos.

Tengo muchas recomendaciones: dumplings de gambas, brochetas, rollitos, pollo al curry verde, pad thai, alguno de sus arroces, las costillas, las tiras de pollo…

 Dumplings de gambas al vapor

 Pad Thai

Pollo al curry verde picante con verduras acompañado de arroz

Precio aproximado por persona: 30€

C/ María de Molina, 50  28006 Madrid
912 75 80 31

2- ..Y a Santander...

Cañadío

Un clásico de Santander que renace reinventado en una ciudad distinta. Dicen que no iguala al original, precisamente por no serlo, pero a mí (que no he probado el otro) me ha encantado.

Canadío ofrece dos opciones distintas, la de pinchos y tapas, o el restaurante sentado.
Ideal para picar algo de buena calidad con los amigos, en la parte de pinchos y tapas de Cañadío encuentras cocina sana del norte, en pinchos elaborados que ya te entran por los ojos al verlos todos en la barra.

Entre las ofertas de pinchos y tapas, este pincho de lomo con patatas paja y pimiento, o este mini bocadillito de huevo, tomate, queso y alguna cosa más que no recuerdo pero que hacían un bocado perfecto.

Difícil elegir y difícil parar. Pero hay que dejar un hueco a la gran tarta de queso, que el camarero nos vendió como "la mejor tarta de queso de Madrid". Tópicos a parte, estaba buenísima y de textura diferente.

Para completar una noche redonda, copazos a buen precio.

En contadas ocasiones consigues cenar bien en un ambiente distinto, y te sale bien de precio (incluso la copa!).

www.restaurantecanadio.com
Precio aproximado por persona: 20€ (en la parte de pinchos, el restaurante es más caro)
Calle del Conde de Peñalver, 86  28006 Madrid
91 281 91 92

1- Quiero ir de viaje a Escocia...

Siempre me ha llamado la atención el kilt, la falda escocesa que llevaban los hombres en Escocia . Esa tela a cuadros tan peculiar se llama tartan, y así de peculiar, original y especial es el restaurante del que hablo hoy en una mesa para dos (o más).

Un restaurante llamado T.a.r.t.a.n.

Dice su página web que entre otras cosas la elección del nombre es por la identidad propia de esta tela, y así es, ya que el restaurante tartan es distinto a lo que estamos acostumbrados.

Decorado con manteles de esta tela, el local es un sitio acogedor de dos plantas. Las mesas son en general pequeñas salvo una enorme de madera que hay en la entrada para unas 12 personas que tengo ganas de utilizar algún día.

Tartan no escatima en detalles: cajas de lata antiguas para la cuenta, tela tartán por todos los rincones, luces cálidas, velas, flores….

Me encanta el formato de su carta, tamaño bloc de notas con un montón de platos.

Todos platos especiales y originales con los que yo tardo un buen rato en decidirme... Lo mejor en mi opinión es elegir varias cosas para compartir.

Os pongo aquí alguno de sus platos pero merece la pena que vayáis para poder elegir por vosotros mismos.

 Ensaladilla rusa con aguacate

 Mini hamburguesitas

 Risotto de gambas sin gambas

De postre mi favorito: Icecream con galleta inglesa y falsos lacasitos.Viene en un tarro de cristal con un papel y una goma a modo de tapa, imitando a un bote de mermelada antigua.

Me encanta

Precio aproximado por persona: 30€

C/ General Pardiñas, 56  28001 Madrid
914 02 76 89